18 de abril de 2018

Desde la elección de la Presidenta Dilma, la derecha y los opositores brasileños vienen trabajando en una campaña de desestabilización de la izquierda y a través de un golpe de Estado han conseguido destituir la Presidenta Dilma de la Presidencia de Brasil. Ella fue la primera mujer en presidir Brasil, una figura con una larga trayectoria política, que se inició con su militancia guerrillera contra el gobierno militar, primero en su Belo Horizonte natal y después en Río de Janeiro y São Paulo. Tras esa injusticia cometida, acreditamos que tenemos la obligación de disculparnos con ella y luchar para que vuelva ocupar el cargo de Presidenta antes de las nuevas elecciones de 2018.

El impeachment de la Presidenta Dilma ha sido sólo uno de los pasos para que la derecha ocupe la presidencia, apostando por un Presidente de Brasil, Michel Temer, que está con el peor y menor índice de aprobación del Gobierno para un Ejecutivo Federal en 28 años, según viene siendo publicado en la prensa.

Desde 2015, miles de brasileños están se movilizando para denunciar el golpe y vienen recibiendo apoyo de todas las partes del mundo, para derrocar a los golpistas.

El actual gobierno brasileño y sus cómplices, intentan de esta vez destruir al ex presidente Lula con prácticas que van en contra de la constitución brasileña, la jurisdicción y los derechos humanos.

La caza judicial al ex Presidente Lula tiene como único objetivo impedir al pueblo brasileño elegirlo una vez más, para Presidente de Brasil, en las próximas elecciones de octubre de 2018.

El proceso contra Lula ocurrió sin pruebas, en un juicio donde no se ha demostrado que haya cometido ningún crimen. Este proceso sólo está basado en acusaciones sin pruebas y delaciones que fueron hechas para ganar favores prometidos por la derecha.

Por ello, el Núcleo del PT en Madrid viene, una vez más, alertar a las autoridades brasileñas y extranjeras sobre los ataques sistemáticos perpetrados contra el ex Presidente Lula, con la única intención de acabar con su carrera política y para que no pueda ser candidato en las elecciones de 2018.

Cabe a nosotros brasileños y a todos los pueblos que defienden la Democracia y los derechos humanos, pedir justicia para Lula y defenderlo de los ataques de los golpistas que juntamente con los buitres capitalistas, quieren mantener la población brasileña en la pobreza, transformar el país en una colonia del FMI, monopolizar la comunicación y aprobar las iniciativas de una prensa mentirosa y capitalista.

Nosotros resistiremos a todas las medidas adoptadas por los golpistas, recusamos revivir el fracaso económico y social de un gobierno ilegítimo, puesto que no queremos volver a un pasado de miseria, cómo era antes de 2002.

Queremos una elección democrática, un juicio justo, queremos que presenten pruebas de las acusaciones contra Lula, queremos la candidatura de Lula para 2018!

 

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