11 de julio de 2020
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Un informe destinado al Congreso de los Estados Unidos advirtió sobre las amenazas a la democracia, al Estado de Derecho, a los derechos humanos y al medio ambiente que se ciernen en Brasil bajo el gobierno de Jair Bolsonaro.

El documento titulado “Brasil: Histórico y Relaciones con los Estados Unidos” fue publicado esta semana por el Servicio de Investigación del Congreso, organismo no partidista responsable de informar a los congresistas sobre los temas que se están discutiendo en la Cámara de Representantes y en el Senado de los norteamericanos.

“Desde que asumió el cargo, el presidente continuó celebrando la dictadura militar brasileña y sus hijos – que tienen un papel importante en su gobierno – cuestionaron la democracia y sugirieron que se pueden tomar medidas autoritarias en ciertas circunstancias. Bolsonaro también participó de protestas donde solicitaban a los militares el cierre del Congreso Nacional y de la Corte Suprema brasileña”, dice el texto.

Además de señalar la erosión de la democracia brasileña, el documento también destaca el fracaso para combatir la pandemia de Covid-19, la creciente militarización del gobierno y las medidas adoptadas por Bolsonaro para debilitar la prensa y eliminar los derechos de las minorías. Según el informe, “los hechos y las declaraciones del presidente han motivado ataques contra periodistas, activistas, comunidades indígenas y quilombolas”, grupos que Bolsonaro percibe como enemigos.

El texto vincula el aumento de la deforestación y los incendios en la selva amazónica con la gestión desastrosa del medio ambiente por parte de Bolsonaro. El tema es de gran interés para los congresistas que actualmente conforman la legislatura, que ya han asignado US$ 15 millones para programas de asistencia en la Amazonía brasileña.

Lula
El documento, firmado por el experto en América Latina Peter J. Meyer, también cuenta la historia reciente del país, incluido el período en que el Partido de los Trabajadores estuvo en la presidencia de la República y el posterior arresto del expresidente Lula.

“El gobierno del presidente Luiz Inácio Lula da Silva (2003 – 2010) utilizó los ingresos de exportación para aumentar la inclusión social y reducir la desigualdad. Entre otras medidas, los gobiernos del Partido de los Trabajadores ampliaron los programas de protección social y aumentaron el sueldo mínimo en un 64% por encima de la inflación. Entre 2003 y 2010, la economía brasileña creció a una tasa anual de 4.1% y la pobreza disminuyó de 28.2 a 13.6%”, informa Meyer.

Meyer citó la destitución de Dilma Rousseff en 2016 y destacó el arresto de Lula en abril de 2018, “lo que le impidió postularse para un tercer mandato presidencial”. En el extracto titulado “El arresto y la liberación de Lula”, el autor hace referencia a los informes sobre las motivaciones políticas y coordinación inadecuada entre los fiscales y el entonces juez Sergio Moro, responsables respectivamente de la acusación y el juicio de los procesos en contra de Lula. La participación de Sergio Moro como ministro de la Justicia y Seguridad Pública del gobierno Jair Bolsonaro también fue destaque en el documento.

Revisado por Colectivo Regina de Sena México-Brasil contra el golpe.